sábado, 30 de abril de 2011

Una vez más entre a ese lugar. Ese lugar que me vio llorar tantas veces como fue posible. En un año había cambiado de lugar. Había empezado a preferir llorar junto a palabras de algún conocido, algún amigo. Hoy preferí que no. Preferí llorar sola. Pensar sola. Preferí entender que necesito pensar en mí antes que en el otro. Entendí que siendo algo fría no voy a matar a nadie. Perdón por todos lo que no tienen nada que ver. Pero necesito congelar un poco mi corazón. Si no, alguien me va a tener que regalar uno nuevo en poco tiempo…

No hay comentarios:

Publicar un comentario