miércoles, 30 de noviembre de 2011

Inventada, pero posible.

La vistes. Su cara de un bello cristal blanco, era lo que recordabas, pero en ese momento estaba manchada con botones violacios e hilos rojos. Sus ojos estaban cansados. Su sonrisa de perlas blancas no se veia. Miraba para todos lados. Intentaba reconocer alguna cara que le diera seguridad. Sostenia su codo derecho con su mano izquierda. Sabias que le dolia. Sus largos cabellos rubios, mas largos de los que recordabas, caian a cada lado de su cara. Un simple buso del personaje imfantil mickey mouse, era lo que la cubria. Nada mas se podia ver. La capucha en su cabeza, cubria parte de su rostro horrorisado. Vistes pequeñas manchas rojas en aquel buso.

La desesperacion te corria por las venas. Hacia dos meses que no sabias nada sobre su paradero. Y hoy, aquel dia soliado, habias decidido salir a despejar tu mente. La preocupacion sobre que horribles cosas le podria estar haciendo ese psinico y sin corazon a tu amiga. Y justo, dos meses despues, la tenias frente a tus ojos. Asustada, golpeada. Imaginastes toda cosa. Todo lo que tu amiga deberia haber sufrido. Las venas te hervian de pura bronca. Sabias que si lo veias, no lo iba a reconocer ni la madre, la abuela, o la ex mujer.

Reaccionastes. Tarde pero seguro. Corristes. La vistes subir la mirada. Viste por lo menos un destello de felicidad en una mirada repleta de tristeza. Te abrazo. Lloro en tu pecho. Sabias que le gustaba llorar abrazada a vos, porque se sentia protegida y comfianda. Le acariciastes la cabeza, muy despasio. Dos lagrimas salieron de tus ojos. Alivio. Alivio de tenerla ahi. De poder protegerla otra vez. De poder ayudarla y decirle 'todo esta bien'.

Minutos abrazada a ella pasaste. Minutos, agradeciendole a hasta a tu perro, que ella este ahi. La mirastes y simplemente le dijistes: 'te extrañe mejor, te extrañe.'

Dos semanas. Dos semanas fue lo que ella estubo en la clinica. Dos semanas en las que, acompañado de tus amigos y tu novia, fuistes a la clinica. Necesitabas contencion y tu novia era la que lograba ese dejo de paz entre tanta locura. Sabias que tu amiga, la queria a tu novia, vos lo sabias.

Aquel dia de febrero, te encontro en la sala de espera con unas bermudas y una remera celeste tomado de la mano de tu novia. Aquella morocha de hermosa sonrisa que te volvia loco y te daba toda la paz que la vida estaba dispuesta a sacarte. La mirastes con una sonrisa y recibistes a cambio un beso. Volvistes a sonreir. Solo eso te salia. Sonreir.

Vistes salir a aquel medico clinico que a tu amiga habia hospitalizado semanas atras. La sonrisa de escuchar que tu amiga estaba de alta, se transformo en una de sorpresa pura al escucharlo decir: 'los cuidan bien, ambos estan vivos de suerte'. ¿Ambos?. ¿Los?. ¿Porque habla en plural?. Mirastes al padre de tu amiga. Su cara te explico todo. La expresion de ese rubio de ojos claros que tantas veces te habia hecho la segunda con tu viejo, habia cambiado su sonrisa contajiosa por una cara de bronca, amargura y ganas de salir a acesinar. Tu cara se clono. La unica manera de que ambas cosas concuerde, la cara de tu 'tio' y el plural del medico, era que el hijo de puta halla dejado a tu hermana y tu sobrino ese dia de sol de dos semanas atras.

Y ahi todo empeso a encajar. Tantos estudios. Tantos perdones de ella. Tantas lagrimas derrochadas de los ojos de tu amiga. Y una frase vino a tu mente. 'Me daria mas verguenza, decirte a vos que vas a ser tio que a mi viejo que va  a ser abuelo'. Y si, se habia cumplido. Esta vez, tu amiga tenia razon. Para ella era peor verte a la cara sabiendo que estaba embarazada, que a su padre. Sabias que odia la desilucion. Pero lo que ella no sabe, es que vos no estabas desilucionado. No era su culpa. Era del analfabeto ese que no sabe lo que es un forro. Vos con gusto le enseñabas como es y como usarlo. Y como premio por aprender, unas buenas piñas tambien.

Dias mas tarde, tu amiga estaba en su casa ya. Vos pasabas todos los dias, de cinco a doce, eran vecinos no importaba el horario en realidad. Esa tarde estrastes a la piesa de ella, y no solo vistes el rosachicle caracteristico de las paredes de tu amiga junto a su cama blanca. Sino que tambien vistes muchas bolsas, un carrito de bebe. Y a tu amiga sentada en el puff verde manzana en una esquina. Estaba con un short y la parte de arriba de su traje de baño. Se notaba ya su pequeño vientre de embarazada. Sus cortos tres meses habian cambiado la anatomia del fisico de tu amiga. La mirastes y te sonrio. Te acercastes y la abrazasate. Ella te tendio una bolsa. La tomaste y sacastes una simple little minnie mouse de peluche de dentro. Tenia ambas manos abiertas y sostenia un cartel. Tus ojos se llenaron de lagrimas. Solo con leer el '¿Queres ser mi padrino?. Micole.', escrito con una perfecta letra cursiva. La mirastes y solo asentistes. Tu amiga lloraba. Vos llorabas. Juntos se abrazaban.

Ese dia en el hospital supiste que ella, no era solo tu amiga, tu mejor amiga. Era tu hermana. Era la mejor persona que conocias y sabias que todo lo que le pasaba no era merecido. Entendistes que tu amiga habia crecido. Ya no era esa nena, fragil e inosente que habia egresado con vos. La vida le habia jugado una mala pasada. Una horrible pasada. Con dieciocho años la vistes acunar a una hermosa bebe. Con diesinueve la vistes salir a la calle con una hermosa bebota de dos colitas rubias y hermosos ojos verdes, sin verguenza. Con veintiun años la vistes llevar a tu ahijada al jardin. Cuando recientemente vos te habias enterado que ibas a ser papa.

Tu ahijada y tu amiga eran tu modelo a seguir. La vida que trajo tu ahijada era lo que lograba que tu amiga siguiera dia a dia. Tu amiga era la clara muestra de fuerza y ganas de vivir la vida. Cargaba con su hija como si fuera producto de un amor eterno. Como si ubiera sido su eleccion. La veias sonreir cuando su hija le decia que era la mejor mama del mundo. Y vos creias lo mismo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario